
Estudio de caso núm. 3
Estudio de caso n.º 2: mujer de 65 años
En el artículo de hoy, veremos un estudio de caso de una mujer de 65 años que experimentó importantes mejoras en su salud al practicar el grounding.
Veamos cómo la conexión a tierra afectó la salud de este paciente.
Introducción al estudio de caso.
Una mujer de 65 años presentó múltiples quejas, incluido dolor crónico en ambos muslos que empeoraba en el lado derecho, dolor en la cadera, dolor en la rodilla derecha, dolor bilateral en el tobillo y el pie, e hinchazón que empeoraba en el lado izquierdo. Además, padecía insomnio, sueño intranquilo, somnolencia diurna, dolor en las piernas que interfería con el sueño y rigidez y dolor al despertar. Los tratamientos farmacológicos tradicionales dieron malos resultados, lo que la llevó a buscar soluciones alternativas.
Introducción de puesta a tierra y tecnología de transferencia de electrones (ETT)
El paciente fue incluido en un ensayo clínico controlado y aleatorizado en el que se utilizó tecnología de transferencia de electrones (ETT), o simplemente conexión a tierra. El 11 de abril de 2005, la paciente comenzó a utilizar el sistema de sueño ETT y se monitoreó su evolución cada 48 horas durante 5 días. La monitorización se realizó mediante imágenes médicas infrarrojas de alta resolución y cuestionarios de resultados clínicos estándar, como la Escala Analógica Visual Cuádruple para el Dolor y el Sueño.
Resultados y observaciones
Después de solo 4 noches usando el sistema para dormir ETT, la paciente informó una mejora significativa en su salud:
- Reducción del dolor: el paciente notó una reducción dramática del dolor después de unas pocas noches de usar el TET. A los pocos días, informó un alivio casi completo del dolor en los muslos y las caderas.
- Reducción de la inflamación: Las imágenes termográficas mostraron una clara reducción de la inflamación en las zonas de dolor, lo que confirmó los sentimientos subjetivos del paciente.
- Mejora de la calidad del sueño: gracias a la conexión a tierra, el paciente experimentó una mejor calidad del sueño, lo que resultó en una reducción de la fatiga diurna y una mejor calidad de vida en general.
- Mejora de la movilidad: la reducción del dolor y la inflamación mejoró la movilidad de la paciente, permitiéndole vivir una vida más activa sin sentir dolor durante las actividades diarias.
Conclusiones
Un estudio de caso de una mujer de 65 años muestra cómo la conexión a tierra mediante tecnología de transferencia de electrones (ETT) puede mejorar significativamente la salud y la calidad de vida, especialmente para las personas que padecen dolor e inflamación crónicos. Earthing apoya los procesos regenerativos naturales del cuerpo, mejora la circulación, reduce la inflamación y mejora la calidad del sueño. Para las personas que recién comienzan su aventura con la conexión a tierra, puede ser un método eficaz y natural para apoyar la salud.